Condenados a morir los 'Samurais de Fukushima'

No tienen esperanzas. Los 300 trabajadores que buscan normalizar la situación de la Central Nuclear de Fukushima, seriamente dañada tras el terremoto que afectó a Japón el pasado mes de marzo, solo esperan morir debido a los altos índices de radiación a los que están expuestos. La madre de uno de los trabajadores ha revelado que su hijo y los demás trabajadores se han reunido para hablar sobre su situación, concluyendo que su única solución será la muerte. "Mi hijo y sus colegas han analizado detenidamente su situación y se han resignado a morir si es necesario a largo plazo", ha señalado la mujer.

Además se ha dado a conocer una serie de mails proveniente de los trabajadores, los cuales hablan de la desesperanza de los hombres. "Llorar es inútil. Si estamos en el infierno ahora todo lo que se puede hacer es trepar hasta el cielo. Por favor, tengan cuidado con la fuerza oculta de la energía nuclear. Me aseguraré de que vayamos a recuperarnos", señala uno de los correos.

Otro de los testimonios habla de un trabajador que no sabe nada de sus padres. "La ciudad en la que vivo, Namie-machi, fue arrasada por el tsunami. Mis padres fueron arrastrados por el tsunami y aún no sé dónde están (...) Estoy encadenado en un trabajo extremadamente duro bajo estas condiciones mentales. ¡No puedo más!".

"Todo el mundo ha perdido todo -su casa, su trabajo, su escuela, sus amigos, sus familias. ¿Quién puede soportar esta realidad? Yo te ruego que compartas esta realidad con la gente dentro y fuera de la empresa", reza otro de los mails. "Esto es como una zona de guerra".

“El terremoto es un desastre natural. Pero Tepco debería ser culpada por la emisión de materiales radiactivos procedentes de las plantas nucleares", acusa otro correo.

Sin duda una dramática situación que viven los "Samurais de Fukushima", que buscan evitar un desastre nuclear aunque arriesguen sus vidas por ello.